Coca-Cola acaba de lanzar su nueva campaña internacional “Taste the feeling” compuesta por cuatro anuncios que animan al consumidor a sentir intensamente y dejarse llevar por sus sensaciones más allá de los convencionalismos o de lo que “debe ser”. Para la realización de los spots ha contado con las sedes iberoamericanas de tres de las más importantes agencias de publicidad: Santo (Argentina), McCann (Madrid) y Ogilvy & Mather (México).
Uno de los anuncios titulado “Pool Boy” hace referencia a la diversidad sexual y muestra como los miembros de una familia sin importar sexo, ni edad se sienten atraídos por el mismo hombre musculado que limpia la piscina y se pelean por él. Este trabajo lo ha realizado la agencia Santo y ha sido alabado por diferentes organizaciones de LGTB (Lesbianas, Gays, Bisexuales y personas Transexuales).
“Elevator” y “Subway” son los spot realizados por la agencia McCann. En el primero una estrella inalcanzable de la música y una “simple” camarera de hotel acaban divirtiéndose juntos y pasando un gran momento a causa de quedarse encerrados en un ascensor. Gracias a compartir una coca cola, ambos dejan a un lado sus diferencias de estatus, se dejan llevar y disfrutan el momento. El spot cuenta con una parte interactiva, al final, bastante original en la que el usuario puede acceder a distintas secuencias en el ascensor en función del piso al que llame, incluso jugar con la velocidad de las imágenes. El segundo se desarrolla en el metro y es aquí donde un productor musical encuentra a la cantante que buscaba. Al oírla, su mente se transporta a un multitudinario concierto en el que ella es la artista. El ejecutivo vislumbra una nueva estrella sin los prejuicios que podrían suponerle que toque en el metro y siente su música.
Por último, la agencia Ogilvy & Mather firma “Eyes closed”, un spot en el que Coca-Cola anima a los consumidores a disfrutar de todos los momentos especiales de su vida con los ojos cerrados para sentir con mayor intensidad.
La estrategia de comunicación sigue siendo de marca única desde que la compañía decidió promocionar todos sus productos bajo el mismo concepto creativo y eje comunicativo el año pasado (Coca-Cola, Coca-Cola Zero, Coca-Cola Light y Coca-Cola-Life)
Con esta campaña Coca-Cola rompe el eje comunicativo que había seguido en su anterior spot titulado “Together is beautiful” , el cual se emitió en la final de la Super Bowl e iba dirigido a la reivindicación de la integración cultural dentro de los Estados Unidos, un tema candente desde la llegada de Donald Trump a la presidencia.